SIMIL DE UNA VIDA DE AYER

Lamentos y gritos  lanzados al silencio, llantos secos de esperanzas muertas, nadie sabe su historia, nadie supo la fobia que sembró la irá de su corazón.

Dicen que todo empezó en el amanecer de su corta edad, cuando la sonrisa recién  había sido dibujada con un pincel delicado en su faz, niña caprichosa, divertida, inquieta como aquella mariposa recién salida de su capullo.

Revoloteaba entre flores y flores, buscando aromas y llenando de alegría donde se posaba,  -dejaba brillos a su paso.

Cuentan que su sonrisa era tan contagiosa y su voz chillona, que jamás causo molestia aunque la hiciera. Tenía un aroma que cautivaba cual misma flor de Lyrio atrayendo a picaflores buscando aquella flor, pero mi pequeña mariposa solo era ella.

El verano, era su escena de coqueteos -sin malicia- regalando sonrisas, alegrías. Dulces frases recibió de la luna en las noches de verano,  cuando iba a reposar... sin presagiar que la luna, seria aquella amiga fiel, compañera de sus noches futuras. 

De vuelos entre vuelos,  fue lastimando sus alas,  picaflores sigilosos iban tras ella... 

Empezó a buscar donde ocultarse, pues ya no quería sonreír ni brindar alegrías, pues en su corazón, había comprobado que siempre había enemigos de quien cuidarse, triste pequeña mariposa que volaba sin rumbo, sin miedo...

Hoy la vi, triste y apagada sin brillos en sus alas, sin emociones de volver a volar. Le acerque un flor de Lyrio, para que intente sentir su aroma y animarse a volar... 

Su mirada no era la misma, no quiso sonreír, triste bajo la cabeza y sobre su pequeñito rostro, corrió una lágrima...

-Que sucedió le pregunte - 

Me han lastimado - contesto... y lanzo su mirada al horizonte, como recordando el dolor de aquella herida...

-Puedo curarte le dije..

Mi herida no es externa, porque ellas las puedo curar, las internas son las que duelen mas... Pusieron trampas en mi camino, yo inocente caí en ellas, intentando salir, me he lastimado, pero no me importan mis alas, mi vuelo ya no será alto - pero mi mayor temor es -  quien me lastimo, es quien más confiaba, y a quien apreciaba...

-Quien fue? - pregunte

Fue mi vida misma, repaso y repaso los momentos de mi corta vida, y en ellos, siempre encuentro que brinde solo alegría, no lastimaba a nadie con mis colores, con mi aroma, con mi brillo ni aleteos..

Porque entonces, mi propia vida, ha sido causante de tanto dolor... Que ha hecho ocultarme en un rama seca... que ni de la lluvia me cubre ya...

Mi corazón, ya no tiene el latir que me impulsaba a querer ir de cada Flor de Lyrio, soy solo la sombra de quien fui...

-Lamento tu pesar - le dije... pero siempre sale el sol cada día..

No más para mi... hasta hoy solo he de vivir, pues mi corazón su latir va descendiendo y has llegado para presenciar mi partida...

-Como te ayudo.. que puedo hacer...

Mis Esperanzas, me mantuvieron hasta hoy, pero se me agotaron, quisiera dar un último vuelo, pero tengo miedo a confiar en ti, tú mirada ya la he visto antes y tengo miedo.  

Si te sigo o me ayudas, tal vez pueda ya no regresar.

-Permíteme, regalar ese último vuelo aunque vayas en la palma de mi mano...

He estado tanto tiempo aferrada a esta rama seca, que no se si pueda desprenderme de ella...

- Te ayudo y veraz que todo mejorará.

-Con temor mi pequeña mariposa, se poso sobre la palma de mi mano, cohibida, con las alas reprimidas y dañadas, ya no podía volar... levante mi palma al sol, para que se contagie de energía.

-Al sentir el calor en sus alas, levanto el rostro suavemente y pude ver que mi dulce mariposa, regalo su ultima sonrisa.

En unos segundos mas, ella murió...

La tenia en mi mano, viendo su frio cuerpo, inmóvil, la ponía mas al sol, para que vuelva a vivir, - lagrimas cayeron de mi rostro - recordando su aleo juguetón.- maldije al que la lastimo, maldije la vida misma, porque matar a una inocente, que daño hizo, a quien hay que vengar...

Maldito el que te lastimo, maldito el que tus colores apago, maldito el que lastimo tus alas, maldito que el tú corazón partió, maldito él, maldito su todo....

De nada vale mas maldecir,... ella partió... descansa ahora de una noche larga noche..

La recuerdo con  esa sonrisa contagiosa, será siempre la imagen que tenga de tí.

Gisette.